Las niñas y los niños otorgan una especial importancia a su cuarto. Es el lugar en el que pueden saltar y jugar, soñar o, simplemente, estar a sus anchas. Así, pues, debe ser un espacio en el que se sientan bien y seguros. Vamos a repasar unos cuantos consejos para crear una habitación infantil acogedora e inspiradora a la par.
Toda pareja de padres o madres primerizos vive con ilusión el momento de pensar y materializar el cuarto de su primer hijo. La mayoría opta por suaves colores pastel o tonos blancos, que encajan muy bien en un interior diseñado al estilo escandinavo, muy popular desde hace año.
Probablemente al principio no sea un cuarto completamente moblado, pero sí necesita un par de elementos indispensables para el día a día con una criatura acabada de nacer.
Los niños crecen y en un abrir y cerrar de ojos caminan solos. Cuando llega este momento, necesitan más espacio para poder jugar y descubrir. Para que puedan dar rienda suelta a su fantasía e imaginación, los mundos imaginarios y el mobiliario a menudo se funden en una sola realidad. Si, además, descubrimos que a nuestra hija o a nuestro hijo le gusta especialmente una serie, un personaje o un deportista en concreto, tal vez sea apropiado decorar su cuarto con motivos que lo representen. La mejor opción es elegir un color neutro para la habitación porque los intereses de los niños cambian a menudo. Además, los libros, los juguetes, la ropa de cama y la decoración ya suelen aportar suficiente color. El blanco es un color clásico y agradable que funciona siempre. Para que la pared sea resistente a la suciedad, se puede recubrir con una capa protectora, una especie de “piel de elefante”.
El suelo del cuarto de los juguetes también debe ser resistente. El suelo laminado cuenta con una capa de melamina resinosa que le confiere una gran resistencia para poder aguantar saltos y juegos de todo tipo y, además, está disponible en muchos diseños distintos. Asimismo, se trata de un suelo muy fácil de limpiar. Muchos piensan que el suelo laminado es frío y ruidoso, pero nuestros productos cuentan con una capa de aislamiento acústico y una estructura óptima que lo convierten en una opción interesante para revestir el suelo del cuarto de los juguetes.
No basta con que el cuarto de los niños sea bonito: muchos de los objetos pensados para las habitaciones infantiles deben tener unas características muy concretas y se les aplican unos criterios muy estrictos a la hora de aprobarlos. A fin de poder ofrecer lo mejor a los más pequeños de la casa, debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:
Si buscamos una pieza de decoración muy concreta para el cuarto de los niños, podemos atrevernos a fabricarla nosotros mismos. Y si, además, la pequeña o el pequeño quiere ayudar, se puede convertir en una auténtica sesión de manualidades. Se pueden cubrir un paño de pared o la puerta del armario con pintura o una lámina de pizarra y convertirla, así, en una superficie sobre la cual puedan explotar infinitamente su lado más artístico. Otra opción es coger una lámpara redonda de color blanco y pintarle un animal o convertirla en la Luna para crear un auténtico mundo nuevo cada noche.
También se pueden usar cintas adhesivas decorativas para decorar la pared. Se pueden usar la cinta para dibujar formas, escribir palabras o estampados de todo tipo en la pared que, a su vez, se podrán retirar fácilmente.