Quien aprovecha el buen tiempo veraniego para eliminar la mala hierba o cortar el césped, o sale a correr una ronda por el bosque, normalmente se descalza antes de entrar a casa consciente de que la suciedad o la humedad podrían causar daños irreparables. Ahora bien, si se instala el revestimiento adecuado en el pasillo y las habitaciones con acceso directo desde el exterior, las pilas de calzado junto a las puertas del jardín y de la casa serán cosa del pasado. A continuación desvelamos qué es importante en estos suelos y las propiedades de cada producto.
En el pasillo y las habitaciones con acceso directo al jardín, el suelo tiene que soportar más que en otras zonas de la casa. El agua, la suciedad húmeda del jardín y las pequeñas piedras que entran en los zapatos pueden estropear los suelos sensibles. En el peor de los casos la superficie podría sufrir arañazos o hincharse. La solución es un suelo resistente al desgaste, idealmente que no requiera cepillados especiales, laboriosos fregados ni productos de limpieza especiales para eliminar la suciedad más resistente.
Resiste holgadamente lo que para un suelo de madera auténtica sería impensable: para el suelo de diseño Meister los grandes charcos de agua o las piedrecitas incrustadas en las suelas no son problema. Las colecciones MeisterDesign. life y MeisterDesign. pro son especialmente fáciles de cuidar y resistentes al agua.
Por eso no solo son óptimas para habitaciones que dan directamente al exterior, sino también para la cocina y el baño. Las salpicaduras de una salsa de tomate caliente o el agua goteando de la puerta de la ducha son pan comido para el suelo de diseño. Además, ni siquiera es necesario prescindir de la estética ni del agradable tacto de la madera, pues ambas colecciones del suelo de diseño Meister están disponibles en numerosas variantes. Hay para todos los gustos: desde la estructura de roble salvaje hasta el efecto hormigón con estructura mineral.
Los charcos de agua, la suciedad del jardín y similares también son un juego de niños para el suelo Nadura, ya que combina las mejores propiedades de dos revestimientos: por un lado, es tan fácil de cuidar como las baldosas, pero más resistente. Por otro, disipa tanto calor como un suelo de madera auténtica. Además ofrece muchas posibilidades estéticas: el suelo Nadura está disponible con aspecto de hormigón o imitando a muchos tipos de piedra y metal.